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Solitario Clásico
El famoso Solitario Clásico entrena la paciencia y el pensamiento lógico, ayuda a divertirse y calmarse. Consideremos con más detalle los matices de este solitario y las sutilezas de la construcción de una estrategia óptima.
Reglas del Solitario Clásico
Las cartas boca arriba se pueden cambiar entre las pilas colocando la carta de menor rango encima de la de mayor rango. Un representante de traje negro solo puede colocarse encima del traje rojo y viceversa. En las pilas, los colores de las cartas deben alternarse sin falta. Si es necesario, se permite que se mueva una carta, toda la cadena o parte de ella. Cuando consigas quitar las cartas boca arriba de las pilas, tendrás que darles la vuelta a las que están boca abajo. Si el espacio se deja vacío, puede poner un rey de cualquier palo o una cadena con un rey comenzando en la parte superior. No se aceptan cartas de otro valor en el espacio vacío.
Si no hay opciones de acciones útiles, puedes usar la reserva, repartiendo una carta a la vez y arrastrando a los Cimientos o pilas la que cambiará la situación creando oportunidad para maniobras. En la versión más complicada del solitario, la reserva muestra tres cartas a la vez, y solo se pueden sacar una a la vez. Además, en algunas versiones de juego no existe la opción de reabrir la reserva si ya se han visto todos sus elementos.
Cómo jugar
La ausencia de un límite de tiempo permite ver cuidadosamente las posiciones iniciales en el diseño. Si hay varias opciones de movimiento, vale la pena preferir la acción que vacía completamente la celda. Esto es crítico en la situación en la que planea mover al rey o la secuencia encabezada por el rey. Luego, la carta boca abajo se volteará boca arriba y aparecerán nuevas variaciones de movimiento.
También hay matices a considerar:
- En caso de apilar cartas boca arriba, aumenta la probabilidad de que se produzca un punto muerto, se recomienda distribuir activamente las cartas entre las Fundaciones;
- Si la tarjeta superior en una Fundación en particular puede ayudar a administrar el diseño, se puede mover a la posición deseada;
- Si recorre toda la reserva, los elementos se repartirán nuevamente en la misma secuencia;
- Recordar el orden de las cartas en la reserva ayuda a entrenar la memoria y permite construir una estrategia más progresista;
- A veces vale la pena confiar en su intuición sin un análisis cuidadoso.
En la mayoría de los casos, es recomendable rellenar las bases de manera uniforme. Pero si hay un diseño en el que las cartas de un palo en particular bloquean todas las maniobras, será razonable juntar este palo en una Base. Cuantos más reyes se envíen a las celdas vacías, más libremente podrá actuar el jugador.
El Solitario Clásico ayuda a desviar la atención, calmarse y concentrarse. Al combinar diferentes reglas, se puede desarrollar una estrategia individual para una solución rápida con un número mínimo de movimientos. El clásico juego de solitario probado durante décadas sigue fascinando a jugadores de todas las edades en todo el mundo.
Diseño y objetivo
La baraja estándar completa de 52 cartas se utiliza para el juego. Algunas de ellas están dispuestas en 7 pilas de modo que las cartas encima de las pilas estén boca arriba, el resto (de 1 a 7 cartas) estén boca abajo. Visualmente, el patrón se asemeja a una bufanda de tres picos, gracias a la cual el inglés Klondike adquirió un nombre correspondiente en la versión rusa. En total, aparecen 28 cartas en los montones, el resto quedan cerradas en la reserva en la esquina superior izquierda. En la parte superior derecha hay cuatro celdas inicialmente vacías, "Fundaciones". Cada celda se puede utilizar para colocar un traje.
El objetivo del juego es organizar todas las cartas de las Fundaciones en un orden determinado. Los ases deben estar en la parte inferior, y todos los representantes del palo desde dos hasta el rey deben colocarse sobre ellos en orden ascendente. La corrección de la táctica elegida influye en el ritmo de aproximación a la meta. Los planes complicados o confiar únicamente en una oportunidad sin considerar los próximos movimientos pueden retrasar el momento de ganar o hacer que sea imposible en absoluto.